La industria automotriz es uno de los sectores más dinámicos de la economía mexicana. El flujo de las inversiones en nuevas plantas o la expansión de las ya existentes asciende a más de 20 mil millones de dólares de las principales empresas armadoras. Una de las principales razones es que México posee acuerdos de libre comercio, de los más liberales del mundo.
En este contexto, Omega Engineering ha ido ganando cada día mayor presencia en este segmento ofreciendo un extenso portafolio de productos de medición y control de procesos que permiten administrar los activos de las plantas industriales y optimizar su proceso al proporcionar las mediciones críticas, el control y la adquisición de datos de los sistemas fundamentales. Desde sensores hasta la sala de control, Omega contribuye a que mejore la calidad y la productividad de este sector industrial.
En la actualidad México es el cuarto exportador mundial de vehículos, desplazando a Brasil del séptimo puesto a nivel de producción. El 80% de los autos fabricados en nuestro país se exportan a otros países y de esos, alrededor de dos tercios a Estados Unidos. La industria de vehículos se ha convertido en pilar para la economía del país ya que representa casi 3% del PIB y da empleo a 1.7 millones de personas, entre puestos directos e indirectos.
Este sector de la economía cuenta con normas, requisitos propios y específicos muy estrictos por parte de los fabricantes de automotores. Sus especificaciones las aplican a sus proveedores que producen piezas, materiales o servicios como pintura o tratamiento térmico de piezas relacionados con la fabricación de automóviles.
La empresa proporciona instrumentación para proveedores de renombre de las principales empresas automotrices como son productos de presión, tensión y fuerza entre ellos, transductores, celdas de carga, sensores de fuerza, manómetros, interruptores de presión y mucho más, con una gama de más de 100 mil productos. Al entender los segmentos clave, es posible proporcionar seguridad en los controles de medición y procesos, teniendo en cuenta los requisitos y las normas que se deben seguir para el mantenimiento de una industria tan exigente. El soporte especializado de los ingenieros resulta clave para estas normas y requisitos.